Música, velas, incienso y, sobre todo, mucha concentración. El taller de Yoga, una de las últimas inciativas en la Vivienda, ha sido un espacio dedicado al cuidado del cuerpo y la mente.
Mediante ejercicios suaves y relajantes nos hemos despedido del estrés y puesto a punto la flexibilidad, el equilibrio, la motricidad…¡y casi sin darnos cuenta!
Además de forma paralela, cada clase se ha complementado con un pequeño taller adicional, como el taller de relajación, dedicado a aprender ejercicios sencillos para poder prácticarlos de forma autónoma. En otra ocasión, en el taller de higiene del sueño pudimos revisar pautas y recomendaciones para favorecer una rutina de descanso saludable.
De esta forma, los usuarios han podido adquirir herramientas de autocontrol y gestión emocional, métodos prácticos con los que canalizar sus emociones adecuadamente.
Una manera distendida y diferente de cuidar nuestra salud física y mental.
Elena Calvo (estudiante de Educación Social en prácticas)
Alba García (Vivienda Tutelada I)
