Llega Marzo, solecito, buen tiempo, los días se notan más largos, las plazas se llenan de gente… y, para muchos valencianos, decir Marzo es decir Fallas. El piso de chicos no es una excepción. Son muchas las ganas que tenemos de que esto empiece a rodar y de disfrutar de un año más de las fiestas de nuestra ciudad.
Por eso no nos dormimos y, hace ya varias semanas, fuimos a visitar la Exposición del Ninot. Nos acercamos por la mañana a la Ciutat de les Arts i de les Ciències para recorrer los pasillos y echarle un vistazo a las creaciones que las comisiones habían elegido como representación de sus monumentos falleros. Es un momento genial, que deja volar la imaginación de los visitantes y con el que los artistas consiguen no dejar indiferente a nadie.
El día 25 de Febrero se celebraba la Mascletà vertical. La primera que se hacía de estas características y ¿cómo íbamos a faltar? Caminando, llegamos hasta muy cerquita del Puente de Calatrava y decidimos que era un sitio perfecto para disfrutarla. Desde allí vimos cómo se iluminaba el espolín de la fallera mayor y el terremoto final que llegaba a los 50 metros de altura. “Al principio parecía como un castillo pero al final ha sido una auténtica mascletà… y con todo el terremoto en el aire! Muy buena” – José Manuel
Al día siguiente hicieron la entrada de bandas de música desde la Plaza de la Virgen y la primera mascletà en el Ayuntamiento ¿Puede haber plan más auténtico? Pues sí! Si lo terminas como hicimos nosotros: una comida de picnic, por el antiguo cauce del río, con cielo despejado y a los pies de las Torres de Serrano que ya estaban engalanadas para la Cridà. No pudimos aguantar en la calle hasta tan tarde, pero desde casa no nos perdimos detalle. “Se nota que la gente tiene muchas ganas de fallas ¡No cabe nadie más en la Plaza del Ayuntamiento… ni por las calles!” – Salva
El último fin de semana, antes de coger ya las vacaciones en nuestros trabajos, nos juntamos en la tarde del sábado para la plantà “al tombe” de la Falla del Ayuntamiento. Ver levantar a pulso, entre unas 300 personas, la estructura más alta de su historia (¡40 metros de altura!) bien valía el desplazamiento. “Una falla tan alta tiene una plantà muy complicada. Les ha costado mucho pero al final lo han conseguido”- Juanjo
Todas las comisiones trabajaban ya levantando sus monumentos y pudimos comprobarlo también en El Pilar y en Convento Jerusalén. Pequeño alto en el camino para cenar, tomar fuerzas y volver para la mascletà nocturna de colores. “Ha sido espectacular y muy intensa” – José Vicente
El domingo nos levantamos cansados pero volvimos a por más pólvora de mediodía. Hicimos tiempo charlando hasta que sonó el tercer aviso y, de nuevo, teníamos día fallero. Calle Xàtiva ya cortada por ríos de gente, mercadillos, puestos ambulantes, niños con bombetas… Y, como no, churrerías. No íbamos a ser menos y en la Vivienda también disfrutamos por la tarde de una típica chocolatà. Chocolate y magdalenas para cerrar el fin de semana y así dar oficialmente la bienvenida a la semana grande de Valencia.
¡Ahora sí! ¡Ya pueden empezar las fallas! ¡Que nosotros estamos preparados!
Manuel Mataix
Educador VT Chicos BonaGent